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¿El futuro está realmente en los autos eléctricos?
Por Carlos V Domínguez

La industria automotriz es la más exitosa de entre los otros medios de transporte en México y el mundo con diferencia. Como ya todos sabemos, los autos, motocicletas, camiones, camionetas e incluso los aviones usan como combustible la gasolina o algún derivado del petróleo.

El debate sobre el reemplazo del petróleo, ante su inminente agotamiento, parecía ya haber sido respondido con la energía eléctrica, pero, ¿los vehículos eléctricos son realmente el futuro de la industria automotriz?

Comenzaremos mencionando los pros de los vehículos eléctricos para luego seguir con sus contras y así poder tener un criterio sobre éstos.

Iniciaremos con uno de los principales atractivos que ofrecen los vehículos eléctricos; la huella de carbono cero (net zero), al ser unidades que no necesitan de un motor de combustión, no requieren de un tubo de escape y por tanto: la emisión de CO2 es inexistente. El único momento donde se emite CO2 es en el proceso de fabricación del automóvil, las cuales se compensan rápidamente durante el uso del coche.

La segunda ventaja de los vehículos eléctricos es la eficiencia del motor eléctrico:
Los motores eléctricos poseen una eficiencia energética significativamente mayor que la de los motores de combustión interna, alcanzando habitualmente alrededor del 90-95%, mientras que los motores de combustión más modernos apenas llegan al 20-35%. Esta diferencia se traduce en un consumo de energía considerablemente menor para los vehículos eléctricos, aproximadamente un tercio en comparación con los vehículos de combustión, lo que se refleja en un costo por kilómetro significativamente reducido y, por ende, en un ahorro económico substancial.

Además, los coches eléctricos se benefician de una serie de tarifas y planes especiales diseñados para facilitar la recarga en el hogar, integrando así el proceso de recarga en el consumo eléctrico doméstico de manera simple y sostenible. Esta combinación de alta eficiencia energética intrínseca y facilidades de recarga hace que los vehículos eléctricos sean más rentables a mediano plazo en comparación con los vehículos de motor de combustión.

Otro de los beneficios de los vehículos eléctricos son sus costes de mantenimiento muy bajos:
Para el funcionamiento del motor eléctrico no hacen falta cambios de aceite, filtros ni refrigerante. Bastaría para tenerlo todo bajo control con una revisión rutinaria de los frenos, los neumáticos o los filtros de polvo y polen -elementos comunes a todos los vehículos-, así como un chequeo periódico del estado de las baterías.

Ya mencionadas las principales bondades de los vehículos eléctricos, hay que empezar con sus “desventajas” o aspectos que nos pueden hacer debatirnos sobre si esta industria es el futuro del transporte.

Una de las primeras limitaciones de los vehículos eléctricos se encuentra en su alcance limitado: Con esto nos referimos a la necesidad de recargar la batería después de recorrer distancias relativamente cortas. Por lo general, los coches eléctricos ofrecen una autonomía que oscila entre los 200 y 300 kilómetros con una carga completa, aunque algunos modelos pueden superar los 400 kilómetros.

Esta restricción en la autonomía representa un desafío significativo para los conductores que realizan viajes largos, ya que puede generar lo que se conoce como “ansiedad por la autonomía”, provocando la preocupación por encontrar un punto de recarga cercano. Es evidente que los vehículos de combustión interna actualmente superan a los eléctricos en términos de autonomía, lo que subraya la necesidad de que los fabricantes sigan avanzando en el desarrollo tecnológico de los coches eléctricos para mejorar su alcance.

Otra problemática que va de la mano con los vehículos eléctricos es la poca Infraestructura de carga en México:
Alrededor del país se encuentran distribuidos alrededor de 3,200 puntos de recarga, formando un total de 1,340 estaciones. Dentro de este conjunto, destaca una estación singular en el mundo, reconocida como la de recarga más rápida. Su capacidad permite tiempos de recarga de entre 7 y 25 minutos, dependiendo de las especificaciones del vehículo y sus baterías. Esta estación, con una potencia de 1 MW, posibilita cargar la batería de un vehículo hasta 20 veces más rápido que un cargador convencional (el problema es que esta estación sólo se encuentra en el estado de Puebla).

La última de las principales desventajas asociadas a los vehículos eléctricos radica en la producción y fabricación de sus baterías, lo cual conlleva el uso de materias primas y procesos que tienen un impacto negativo en el medio ambiente. Estas baterías están compuestas por materiales como el litio, cobalto, níquel y manganeso, cuya extracción a menudo resulta en contaminación y degradación del entorno natural. Por ejemplo, la extracción de litio requiere grandes cantidades de agua. Además, la fabricación de las baterías implica un consumo considerable de energía y recursos naturales, contribuyendo así a la huella ambiental global.

Con estas ventajas y desventajas sobre los vehículos eléctricos queremos crear conciencia sobre las posibles consecuencias que podría tener la industria eléctrica en un futuro.

Como siempre agradezco por el espacio en el suplemento dominical. ¡Hasta la próxima!

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