
Seis meses de mediciones de los niveles de polución, tomadas en los puntos en los que se realizarán el triatlón y las aguas abiertas de París 2024, han demostrado que las aguas del río continúan contaminadas, y el saneamiento al que han sido sometidas no garantiza que las pruebas se realicen de forma segura para los atletas.
La revelación hecha por la ONG francesa Surfrider representa un nuevo revés para la organización, cuando apenas faltan poco más de tres meses para una ceremonia inaugural que tendrá 180 botes circulando por las aguas del río que atraviesa la capital francesa.
Llega en momentos en que las intensas lluvias que han sorprendido a París han forzado incluso a reubicar el reloj que lleva la cuenta regresiva para los Juegos Olímpicos. Las precipitaciones son una mala noticia porque precisamente es el aumento del caudal el principal obstáculo para mantener en niveles aceptables la contaminación.
En una carta abierta, Surfrider advierte que las pruebas realizadas por el grupo de análisis ambiental Analy-Co y por l’Eau de Paris, el mismo laboratorio que asiste al Ayuntamiento de la Ciudad Luz, muestran altas concentraciones de Escherichia Coli y enterococos, muy superiores a lo que se considera seguro.
La noticia llega apenas semanas después de que el presidente Emmanuel Macron prometiera nadar en las aguas del Sena como una demostración de su confianza en las labores de saneamiento.
Con AFP y Reuters