Así fueron los primeros torneos oficiales de fútbol femenino

Corría el año 1895 cuando la ciudad de Londres, Inglaterra, fue testigo del primer partido de fútbol femenino, detalla la Federación Internacional de Fútbol Asociación​ (FIFA). El primer mundial ocurriría casi un siglo después.

Aquel encuentro inaugural fue organizado por el British Ladies’ Football Club (BLFC), enfrentó a dos equipos locales y más de 10 000 personas presenciaron el evento, además de una importante cantidad de periodistas.

Los inicios del fútbol femenino en Latinoamérica y el mundo

La ejecución del ejercicio por parte de las mujeres cobró relevancia con el transcurso del tiempo y, en particular, durante las dos guerras mundiales, cuando las mujeres comenzaron a participar de actividades tradicionalmente reservadas a los hombres.

En Latinoamérica, los primeros partidos de fútbol femenil se remontan a la década de 1910 y, al igual que aquel juego inglés, al comienzo recibieron la atención del público.

Según el documento de 2023 de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) titulado Manual de Fútbol Femenino, el primer partido jugado por mujeres en Argentina se realizó en 1923 y más de 6000 personas lo vieron.

El apoyo inicial al fútbol femenino no fue permanente

Aunque los primeros partidos organizados por el BLFC fueron contemplados por numerosas personas, el apoyo no fue permanente, ya que la Asociación de Fútbol británica prohibió la práctica femenina durante cincuenta años a partir de 1921, reconoce The National Archives, un departamento no ministerial y el archivo y editor oficial del gobierno del Reino Unido.

En Latinoamérica también se restringió el acceso de las mujeres a la práctica de este deporte, admite la Conmebol en el documento de 2023.

De acuerdo con el texto, la prohibición se dio, por ejemplo, en Brasil entre 1941 y 1979 “cuando las mujeres no pudieron jugar públicamente al fútbol, ya que existía una legislación que les prohibía a las ciudadanas el acceso a esta práctica con el pretexto de cuidar su ‘integridad procreativa’”.

Cuándo se jugó el primer mundial de fútbol femenino

Estas restricciones comenzaron a flexibilizarse en la región en la década de 1970, señala la confederación.

Un hito importante para la flexibilización se remonta a una competición internacional de fútbol femenino que se disputó en Italia. Un grupo de mexicanas compitió en el evento y un año después, en 1971, el Estadio Azteca se convirtió en la nueva sede del evento, que concluyó con un 3 a 0 que dejó a Dinamarca como campeón y a México como subcampeón.

Casi dos décadas después, en 1988, la FIFA organizó en China el Torneo Internacional de Fútbol Femenino. Ese mismo año, la entidad aprobó la realización de la primera Copa Mundial Femenina de la FIFA, que se realizó en 1991 en China. El equipo ganador fue la selección estadounidense, que superó a Noruega por 2 a 1.

Poco a poco, las mujeres comenzaron a tener un rol preponderante en el deporte a nivel internacional y el apoyo popular. Se estima que en 1996, por ejemplo, casi 80 000 fanáticos vieron cómo la selección femenina de fútbol de Estados Unidos se llevaba el oro durante los Juegos Olímpicos de Atlanta.

Otros momentos destacados son la inclusión en 1999 de la práctica en los Juegos Panamericanos, y la Primera Copa Libertadores de América Femenina (un torneo que tiene lugar en Sudamérica) realizada en 2009 y que concluyó con la victoria del Santos de Brasil.

La Copa Oro W de Concacaf es otro paso para las selecciones de fútbol femenino. La primera edición del torneo se juega en 2024, entre el 17 de febrero y el 10 de marzo y es una instancia más de inspiración para mujeres y niñas de la región, sostiene la Confederación de Fútbol de la Asociación del Norte, Centroamérica y el Caribe (Concacaf).

Un futuro prometedor para las futbolistas del mundo

Cada vez más mujeres se calzan los botines y salen a la cancha a disfrutar del deporte y a mostrar su talento. “Actualmente, el fútbol femenil goza de mayor relevancia que nunca y está evolucionando por todo el planeta, tanto en la cantidad de mujeres y niñas que lo practican, como en el grado de profesionalización o en los ingresos comerciales generados”, reconoce la FIFA.

Según su informe Fútbol femenino: encuesta a las federaciones miembro 2023, 16.6 millones de niñas y mujeres participan en fútbol federado, lo cual representa un aumento de un 25 % con respecto a 2019.

Inclusive, su inclusión en los torneos se ha incrementado. En la Copa Mundial Femenina de 2019 participaron 24 selecciones. Mientras que en 2023 el evento contó con la presencia de 32 equipos.

Durante los últimos años la presencia femenina ha crecido de forma considerable en países de tradición futbolística. Es el caso de México, que protagonizó un crecimiento espectacular en el número de mujeres y niñas que forman parte del fútbol federado: de 50 000 en 2019 a 1 500 000 en 2023 (un aumento del 2900 %).

Las mujeres estuvieron en la cancha desde un inicio, jugaron en condiciones disparejas con talento, sacrificio y sentido de justicia. No solo han ido cambiado el rostro del fútbol mundial y regional, sino que son parte de la construcción de una sociedad más justa, plural e inclusiva”, concluye la Conmebol.

Mostrar más
Botón volver arriba