La Federación Inglesa de Futbol (FA) podría sancionar al Manchester City por no impedir el comportamiento de algunos de sus jugadores, enfadados por una polémica decisión final del árbitro, tras el empate (3-3) del pasado domingo en la Premier League ante el Tottenham Hotspur.
Los jugadores del conjunto que entrena Pep Guardiola, y en particular el delantero noruego Erling Haaland, reaccionaron enfadados después de que el árbitro Simon Hooper decidiese pitar falta sobre el noruego después de que aparentemente diese la ley de la ventaja y Jack Grealish se enfilara completamente solo rumbo a la portería rival.
El internacional noruego continuó dejando patente su enfado mientras abandonaba el terreno de juego del Etihad Stadium tras el pitido final y más tarde fue aún más lejos al publicar un comentario criticando a Hooper en las redes sociales.
«El Manchester City fue acusado de infringir la Regla 20.1 de la FA (Federación Inglesa de Futbol) después de que sus jugadores rodearan al árbitro del partido durante su encuentro de la Premier League contra el Tottenham Hotspur el domingo 3 de diciembre de 2023», apuntó la cuenta de la red social ‘X’ del portavoz de la FA.
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