Por Carolina Aguilar.
A raíz de la iniciativa presentada por la diputada federal por Chihuahua, Susana Prieto, de reducir la jornada laboral a 48 horas a la semana, el senador de la República, Rafael Espino, destacó que esa propuesta es inviable, remarcando la necesidad de mayor responsabilidad al realizar propuestas y modificaciones.
Esto se debe a que señaló que es una propuesta difícil de cumplir, además de carecer de una sustentación adecuada sobre cómo se podría llevar a cabo de manera viable.
Destacando que afectaría principalmente a las pequeñas y medianas empresas, generando un costo significativo para el sector empresarial, aumentando la informalidad, perjudicando a los trabajadores en lugar de ayudarlos.
Por lo cual subrayo que esta medida aumentaría los costos de operación para las industrias, volviendo inviables muchas empresas.
«Incrementa los costos de operación para tener una desventaja competitiva con todo el sector informal, pues lo único que va a hacer es promover más informalidad y un aumento injustificado en los costos, que terminará dañando precisamente a los trabajadores a los que busca ayudar, la cuestión es que hay que ser cautelosos, fundamentar bien las propuestas, entiendo que son tiempos políticos y muchas de estas iniciativas tienen un sentido pedagógico, pero diría que hay que ser responsable a la hora de promover», expresó.
Además, destacó que durante el Gobierno de la Cuarta Transformación se han implementado medidas para apoyar al sector trabajador, como el incremento del salario mínimo y el aumento de las vacaciones de 6 a 12 días anuales.
No obstante, detalló que si se desea ayudar a los trabajadores, se deberían buscar políticas que incluyan una mayor remuneración y aumentos en los derechos laborales, incrementos que al aplicarse, no deberían generar costos excesivos para las empresas de menores ingresos.