Un vicario de la Diocesis de la Tarahumara, alertó a medios nacionales por la supuesta presencia de José Noriel Portillo Gil alias El Chueco en el poblado de Cerocahui, municipio de Urique, en últimas horas.
Tras difundirse dicha información se reportó que existe una psicosis en la región, pues se trataría de su regreso justo a tres meses de lo ocurrido en aquella población que dejó a dos sacerdotes jesuitas, un guía de turistas y un joven beisbolista sin vida.
Fue Héctor Fernando Martínez Espinoza, vicario de la Diocesis de la Tarahumara, quien lanzó un llamado a las autoridades federales, para que tanto el Ejercito como la Guardia Nacional mantenga su presencia.
De acuerdo a lo que trasciende, se ha observado al líder criminal desde hace un mes rondando por las calles de los diferentes poblados.