Alejandra Moreno.
En días pasados se dio a conocer el caso de un entrenador de grupos de porristas, Víctor Manuel N. M., que fue denunciado por violación y abuso sexual agravado por tres mujeres que en su momento eran menores y que las violentó siendo sus alumnas.
Este lunes 17 de octubre fue la audiencia de vinculación a proceso la cual encabezó el juez de control Agustín Fernando Saláis Ortíz, quien vinculó al acusado únicamente por un delito; el de abuso sexual agravado y se ordenó un brazalete GPS a fin de que se lleve su proceso con arresto domiciliario.
Víctor Manuel fue imputado por un delito de violación sexual agravado y dos delitos de abuso sexual en penalidad agravada; el juez en mención desechó la violación, pues según sus argumentos, la menor “no puso resistencia seria y constante (…) incluso se abandonó al gozo”.
En ese sentido, el juez responsable expuso que, como a su consideración la víctima no se resistió, gritó o pidió auxilio en el lugar donde surgió el acto, que era la escuela donde él ofrecía sus entrenamientos, por lo tanto, no era creíble que se tratara de una violación, pese a que la afectada narró que ella pidió ayuda a dos de sus compañeras que estaban en el gimnasio, afuera del área del baño.
Cabe mencionar que en dicha audiencia, llevada por la causa penal 3378/2021, se dio a conocer que la víctima de violación pasó por exámenes periciales y psicológicos que arrojaron estrés postraumático, depresión y ansiedad, como secuelas de su abuso.
De acuerdo a la carpeta, las denuncias se hicieron el año pasado, pero los actos se efectuaron hace años más atrás cuando las afectadas no tenían aún la mayoría de edad.
El otro caso de abuso sexual agravado también fue desechado.
El acusado, Víctor Manuel, fue electo como presidente de la mesa directiva de la Asociación de Porristas y Grupos de Animación del Estado de Chihuahua A.C., para el periodo 2015-2019, con aval de la Federación Mexicana de Porristas y Grupos de Animación A.C. y del Instituto Chihuahuense del Deporte y Cultura Física, el 02 de octubre del 2015.
Su elección se dió, entre otras cosas, debido a que en el 2014 fue galardonado con el Premio Teporaca 2014, edición XXVIII en la categoría de Porra y Grupos de Animación.