A DECIR VERDAD

Los imitadores del gran farsante
Por Rubén Íñiguez

Este sexenio será recordado por ser el más mentiroso de la historia de México, plagado de descalificaciones a los disidentes entre los que encuentran partidos de oposición, Organismos autónomos, los jesuitas, los obispos católicos, y la comunidad judía, así como los medios de comunicación que no son paleros de las falsedades oficiales.
Pero López Obrador no es el único, una legión de clones salen con sus imitaciones y copias malhechas del método del presidente para negar lo que es comprobado.
La negación de evidencias, compartida incluso por el gobernador de Jalisco Enrique Alfaro, que rectificó e intentó no perder la buena relación con el arzobispado de Guadalajara, dialogando con el Cardenal Robles, pues sus señalamientos de inseguridad en el estado o negar el móvil del ataque a Susana Mendoza Carreño, que por fin y a raíz de la presión mediática, el gobierno estatal ya aceptó explorar otras líneas de investigación.
Con cinismo, con simplezas, con ocurrencias extravagantes, que lo llevan a magnificar sus errores por el mundo, López Obrador ha mostrado un camino errático que por lo mismo se burlan de él en Argentina, en España, y en otros países europeos.
Esa política de comunicación manipulada es lo que encarna la mañanera. Veamos a los pendencieros, a los que pretenden encarcelar, perseguir o callar voces de medios independientes que juzgan opositores.
En ese grupo están Cuitláhuac García, de Veracruz. En el mismo tono guinda, muy usual en sus transmisiones, se ubica Miguel Barbosa, de Puebla, que ataca a los “enemigos de la 4T” lo mismo que los del pasado, con la misma táctica del presidente.
En este grupo pendenciero se aloja Alfonso Durazo, de Sonora, poco tolerante a las preguntas que juzga incómodas, pretende hacer un decreto de ley para encarcelar a los periodistas que incurran en acusaciones contra el gobernador y su gabinete.
Se hacen las víctimas. Esta táctica es de las favoritas de López Obrador, pues ha dicho en reiteradas ocasiones que ha sido el presidente de México más criticado de toda la historia (seguro ni siquiera la conoce!). Por lo tanto, sus secuaces también la utilizan muy seguido haciendo reflexiones de ¿por qué antes no señalaban tal cosa y ahora que está MORENA, se lanzan con todo? Esta es la táctica del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, que tiene su “semanera” para llorar por la injusticia de los medios perversos que lo atacan a él y al presidente, por el retén de Badiraguato, saludando al cartel del narcotráfico.
Layla Sansores, célebre por convertirse en el verdugo de Alito Moreno, mediante material obtenido por espionajes, tiene su “martes de jaguar” oscila entre la descalificación, los otros datos y la beligerancia, pero sin duda, hay una saña personal en contra del presidente del PRI nacional.
Claudia Sheinbaum, fiel espejo del pejepochtli, tiene su “medianera” en que presume logros de su administración, y dedica amplio espacio en ser solidaria a todo momento al presidente. De hecho, es ya un medio de campaña que no tienen las otras corcholatas.
Indira Vizcaíno, que casi renuncia por la presión del crimen organizado, ha tomado la pauta y tiene su programa que llama “diálogos por la transformación”, como siempre dedicada a la alabanza oficial de obras, dichos y proyectos.
En Zacatecas, David Monreal tiene su programa “nueva gobernanza” para alabar sus avances y dar gracias a Dios en materia de seguridad pública porque no encuentra la puerta, ni mejor solución que la de orar.
Evelyn Salgado prefirió hasta hoy no hacer otro clon de la mañanera, es muy precavida y bajo la sombra de su papá Félix Salgado Macedonio, en Guerrero solamente se maneja por sus plataformas digitales oficiales. No acepta prensa en ninguno de sus eventos, no da conferencias o contesta preguntas banqueteras, es inaccesible la que ofreció grandes avances democráticos, pero no es en comunicación y es intimidante con quien la critica.
Otro gobernador que usa la táctica de esconderse como Evelyn, es Rutilio Escandón de Chiapas, que prefiere no ser noticia por ningún motivo. Ser parte de la Mesa Coordinadora de Seguridad y la Paz, a su criterio lo hizo vulnerable y opta por no aparecer.
Víctor Castro Cosío, de Baja California, ha tenido dos encuentros con los medios y no le agrada desenvolverse ante la prensa. Anunció que su información será por vía del boletín que emitirá su Oficina de Gobierno.
María Lezema, alumna de Pedro Joaquín Codwell, en Quintana Roo, acepta su nueva identidad morenista y optará por tener su mañanera para ver qué consigue.
Por último, los “simpáticos” hasta hoy colegas nos reportan que en Nayarit Miguel Ángel Navarro y en Michoacán, Alfredo Ramírez, invitan café, jugo, desayuno, contestan preguntas y no se esconden, pero están en la fase de luna de miel de sus gobiernos, pero eso puede cambiar.
Los clones buscan mañaneras, en tanto en Palacio sigue el modelo de atacar a los periodistas sin tregua, pese a las nuevas víctimas que se han agregado al obituario como Antonio de la Cruz, de ciudad Victoria.
Finalmente, sólo se requiere una relación profesional, oportuna, respetuosa y abierta para tener la atención de los comunicadores y tener opiniones diversas con participación de la sociedad. El intentar engañarlos, darles señuelos, y distractores, solamente dividen más a la sociedad mexicana; lo que ha hecho siempre la mañanera y que repiten como periquitos los gobernadores morenos. Sin embargo, tantas mentiras se revertirán tarde que temprano y en forma inevitable con resultados negativos e incredulidad.

Mostrar más
Botón volver arriba