Las autoridades de Tailandia han informado este miércoles de que el país está listo para registrar vacunas contra la COVID-19, si bien han aprobado, de forma paralela, el uso de extractos de plantas a base de hierbas para tratar las primeras etapas de la enfermedad.
Se trata de un programa piloto que ha recibido luz verde en el marco de un nuevo brote de coronavirus registrado a nivel nacional, según informaciones del diario ‘The Bangkok Post’.
La ‘andrographis paniculata’, una especie de planta medicina perteneciente a la familia de las acantáceas, servirá así como tratamiento alternativo para reducir la gravedad del brote y recortar los costes del tratamiento.
Dicha planta herbácea que crece fundamentalmente en India y Sri Lanka.
En el último día el país ha constatado 250 nuevos casos, lo que sitúa en 7 mil la cifra total de contagios desde que comenzó la pandemia.
Para el Gobierno, el aumento de la tasa de incidencia es «alarmante», por lo que ha pedido a la población que permanezca en casa para prevenir así que el virus se siga expandiendo.
El Gobierno ha prohibido, además, grandes aglomeraciones en zonas de alto riesgo, tal y como ha explicado Taweesilp Witsanuyotin, portavoz del centro nacional de respuesta a la crisis sanitaria.