El que sí es pelele de Donald Trump
Por CACHO
Bien dijo el presidente López en su conferencia matutina del miércoles que “no somos colonia, somos un país libre, independiente, soberano, el gobierno de México no es pelele de ningún gobierno extranjero”.
Esto lo dijo cuando le preguntaron si podría haber represalias de parte de Estados Unidos al no reconocer aún a Joe Biden como presidente electo de aquel país.
Tiene absoluta razón.
No somos colonia, México es un país libre, soberano y el gobierno del país no es pelele de ninguno extranjero, aquí el pelele es López, que no es el país, y lo es de Donald Trump, el presidente de los Estados Unidos.
Si no, baste citar, y lo haré de manera textual, palabras pronunciadas en actitud genuflexa por López Obrador en su visita a Washington a principios de julio del presente año.
Cabe destacar que es su primero, y único viaje al exterior, como presidente de los Estados Unidos Mexicanos. Desairó las reuniones del G-20 y la Organización de las Naciones Unidas, entre otras.
Sólo para aligerar la atmósfera mencionaré la intervención del tabasqueño encumbrado en la silla presidencial durante una conferencia con miembros de la ONU, a través de ciberconferencia en la que les platicó que, en este país, se llevó a cabo la rifa de un avión que no se rifó y que, además –dijo –, “lo vamos a vender”.
Declara un fraude a dignatarios y diplomáticos de otros países (como si eso les interesara), menos aún, tratándose del mandatario que preside una de las naciones integrantes del Consejo de Seguridad del organismo internacional.
En fin, se trata de un pelele.
Y sí, porque Donald Trump lo empleó para su campaña electoral, lo llamó a Washington, y sin reparos, López abordó un avión con escalas y hasta tuvo la osadía de ¡usar un cubrebocas!, por supuesto, si no, los norteamericanos lo bajan del avión.
Una vez en la nación vecina, durante un evento público López mencionó en su discurso y como lo advertí previamente, textualmente dijo:
“Ahora que decidí venir a este encuentro con usted, presidente Trump, en mi país se desató un buen debate sobre la conveniencia de este viaje. Yo decidí venir porque, ya lo expresé, es muy importante la puesta en marcha del Tratado, pero también quise estar aquí para agradecerle al pueblo de Estados Unidos, a su gobierno y a usted, presidente Trump, por ser cada vez más respetuosos con nuestros paisanos mexicanos.
A usted, presidente Trump, le agradezco su comprensión y la ayuda que nos ha brindado en asuntos de comercio, petróleo, así como su apoyo personal para la adquisición de equipos médicos que necesitábamos con urgencia para tratar a nuestros enfermos del COVID-19.
Pero lo que más aprecio, es que usted nunca ha buscado imponernos nada que viole o vulnere nuestra soberanía. En vez de la Doctrina Monroe, usted ha seguido, en nuestro caso, el sabio consejo del ilustre y prudente George Washington, quien advertía que “las naciones no deben aprovecharse del infortunio de otros pueblos”. Usted no ha pretendido tratarnos como colonia, sino que, por el contrario, ha honrado nuestra condición de nación independiente. Por eso estoy aquí, para expresar al pueblo de Estados Unidos que su presidente se ha comportado hacia nosotros con gentileza y respeto. Nos ha tratado como lo que somos: un país y un pueblo digno, libre, democrático y soberano.
¿Más respetuoso con nuestros paisanos? ¿Cuántos jóvenes de origen mexicano, de los llamados “dreamers”, sufren por la intención de Trump de deportarlos? Seguro que eso es mejorar el trato, sólo por mencionar un ejemplo.
Luego aprecia López, sumisamente, que el mandatario norteamericano haya amenazado con imponer aranceles leoninos a México y que, tras esa amenaza, el tabasqueño “le levantó el muro” a Trump con unos 26 mil miembros de la guardia nacional. Seguro que ésa es una gran ayuda en el asunto del comercio entre ambos países.
Luego, de una manera por demás zalamera, López le dice a Trump que “se ha comportado hacia nosotros con gentileza y respeto.
Se le olvidó, o de plano, ingirió su propia dignidad, cuando el presidente Trump tachaba a los mexicanos como “bad hombres”.
Todos los mexicanos somos violadores, narcotraficantes, tratantes de blancas, delincuentes al fin, para el señor Trump.
No sé en cuál población recóndita del estado de Tabasco eso es un trato gentil y de respeto, porque al menos para la inmensa mayoría de los pobladores de México, no lo es. Y digo la inmensa mayoría, pues sí existen mexicanos que defienden lo indefendible, como pueden ser estas palabras.
Pues sí, México no es pelele de ningún gobierno, el presidente sí lo es… de Donald Trump.
Pues, se tenía que decir… y se dijo.