SE TIENE QUE DECIR

Segundo informe de mentiras… pero poquitas
Por CACHO

El martes pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador rindió lo que él llamó su Segundo Informe de Gobierno y aunque no todo lo que mencionó en su perorata es mentira, hay una, especialmente una, que sí es mentira y que además, lastima de una manera grave a la sociedad mexicana: «… ya no hay desapariciones ni masacres como en gobiernos anteriores…».
Van algunos cuestionamientos serios, muy serios… ¿por quiénes nos está tomando el presidente? ¿Por tontos y ciegos? ¿Nos ve acaso como entes, que no ciudadanos con criterio, capacidad de raciocinio y de crítica?
Es, definitivamente, una desvergüenza superlativa, la de este político tabasqueño que piensa que diciendo mentiras, cual enfermo mental -dicho lo anterior con la mayor seriedad posible, pues la mitomanía es un trastorno patológico que consiste en falsear la realidad como vía de escape para obtener aprobación o admiración-, va a poder ocultar los hechos que nos abofetean con una realidad agobiante.
Veamos.
De acuerdo con los datos que da a conocer públicamente el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, del 1 de diciembre de 2018 al 24 de julio del presente año, el tiempo que lleva al frente de la administración el presidente Andrés Manuel López Obrador, las fiscalías estatales y federales han registrado 58 mil 698 homicidios dolosos en México.
Súmele los ocurridos en agosto, que superan los dos mil, siendo bastante prudente con la cifra. Esto quiere decir que son más de 60 mil muertes, un promedio diario arriba de 90.
Pero específicamente, dice López Obrador que ya no hay desapariciones…
Desde que AMLO asumió la Presidencia, se denunció la desaparición de 63 mil 523 personas, fueron encontradas 35 mil 652 y sigue sin saberse de 27 mil 871. De las que aparecieron, 33 mil 327 fueron hallados con vida y 2 mil 352 fallecidos.
Tampoco masacres… bueno.
Para que quede lo suficientemente claro, la definición que da la Real Academia Española al vocablo es la siguiente:
masacre
Del fr. massacre.
1. f. Matanza de personas, por lo general indefensas, producida por ataque armado o causa parecida.
Seguramente el hombre más informado del país, no se enteró que, por ejemplo, el 27 de agosto de 2019 en el bar White Horse de Coatzacoalcos, Veracruz, sicarios acribillaron a 30 personas, incluidas 10 mujeres, 11 más fueron heridas. En el sitio murieron 23 personas y conforme pasó el tiempo, el número de víctimas mortales aumentó hasta sumar 30 decesos, aunque López Obrador la minimice, sí califica pues como masacre, aunque sea “de panzazo”.
Otro episodio del 2019, registrado el 20 de abril en Minatitlán, también en Veracruz, tres hombres dispararon contra los asistentes a un convivio familiar en la palapa «Los Potros». Lo hicieron de manera indiscriminada, pues entre las víctimas se encontraba un bebé de apenas un año; murieron 13 personas y 18 resultaron heridas.
Previamente, en Maravatío, Michoacán, el 27 de abril, fueron acribilladas 21 personas, luego, el 21 de julio, dos hombres entraron a un bar en la Zona Dorada de Acapulco, se encaminaron hacia su objetivo en una mesa y dispararon contra los ahí presentes; el saldo fue de cinco muertos y cinco heridos.
Este año, el primero de julio en Irapuato, Guanajuato, un comando irrumpió en un centro de rehabilitación y asesinó a 24 usuarios.
Pero también toca hablar de muertes de chihuahuenses.
¿Será posible que López Obrador no recuerde la masacre de integrantes de la familia Le Barón en Bavispe, Sonora, el 4 de noviembre de 2019, cuando asesinaron a mansalva a Rhonita, hija de Julián LeBarón, a dos mujeres más y siete menores de edad?
¡Qué poca… memoria!
En esa masacre (de las que ya no hay, según AMLO) se dispararon más de 3 mil 500 tiros en contra de las inermes víctimas.
Durante un enfrentamiento entre grupos rivales, pertenecientes al crimen organizado, que se efectuó el 4 de abril del presente año, en Ciudad Madera, arrojó como saldo 19 muertos, ¿es posible que para el mandatario adicto a la mentira no parezca que esto es una masacre?
Por último, no en orden cronológico pero sí válido para mencionarlo, entre el 5 y el 6 de noviembre del año pasado, en Ciudad Juárez, hombres armados con fusiles de asalto, prendieron fuego a unos cinco vehículos particulares y 10 autobuses; por cierto, uno de ellos llevaba varios pasajeros. Estos hechos devinieron en el fallecimiento de ocho personas y 14 más sufrieron heridas, todas las víctimas, empleados de una maquiladora.
Así las cosas, en el planeta de “yo tengo otros datos”, en el de las máximas de “no mentir, no robar, no traicionar”, yo veo una realidad que avasalla a esos dichos de un político que se piensa (y se lo cree) poseedor de la verdad absoluta. Siento también que me mienten, me roban la verdad y por ende, me traicionan como gobernado.
Pues, se tenía que decir… y se dijo.

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