El presidente republicano Donald Trump probablemente se convertirá en el tercer presidente de Estados Unidos en enfrentar un juicio político cuando la Cámara de Representantes someta a votación los cargos de obstrucción por sus esfuerzos para presionar a Ucrania a que investigara a su rival Joe Biden.
Trump enfrenta un cargo de abuso de poder por pedir al Ucrania investigar a Biden, uno de los contendores demócratas para la carrera del 2020 y uno de obstrucción a la investigación del Congreso sobre esa materia.
El presidente ha negado cualquier proceder incorrecto.
“El juicio político es una falsedad. Es una vergüenza”, dijo Trump el viernes. “No hay nada mal hecho. Usar el poder de un juicio político para este sinsentido es una vergüenza para este país”.
La Cámara probablemente asumirá el asunto el miércoles, estableciendo las bases para una nueva votación esta semana sobre si aprobar los cargos y enviar el asunto al Senado, liderado por los republicanos, con el fin de llevar a cabo un juicio sobre su permanencia en el poder.
Los demócratas, que gozan de una mayoría de 36 escaños en la Cámara, esperan ganar la votación sobre el “impeachment”, que requiere de mayoría simple.
Los republicanos tienen 53 de los 100 escaños del Senado donde se requiere una mayoría de dos tercios para remover al presidente.
En busca de fundamentos para un juicio, el líder demócrata del Senado Chuck Schumer llamó el domingo a dar su testimonio al jefe de gabinete interino de la Casa Blanca Mick Mulvaney, al exasesor de seguridad nacional John Bolton, al asesor de Mulvaney Robert Blair y el funcionario presupuestario Michael Duffey.
Schumer hizo su llamado al líder de la mayoría republicana del Senado Mitch McConnell, que dijo la semana pasada que estaba coordinando con la Casa Blanca y que había elevado la posibilidad de un juicio político breve sin convocar a testigos.
La Casa Blanca no respondió en lo inmediato un pedido de comentarios sobre la carta de Schumer.