Tras haber sido rechazado cinco veces por el Senado para ocupar un cargo público en el sector energético, Ángel Carrizales López fue designado como el nuevo director ejecutivo de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El regulador ambiental es responsable de vigilar, y en caso de dañar el medio ambiente, regular y sancionar actividades del sector de hidrocarburos, incluida la polémica técnica de extracción fractura hidráulica, mejor conocida como fracking.
“Entiendo que el ejecutivo está en contra del fracking. Sin embargo, yo creo que el fracking ha mejorado muchísimo”, declaró Carrizales durante su comparecencia en el senado para encabezar la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) el pasado 5 de noviembre.
Esta técnica ha despertado múltiples alarmas internacionales por impactos ambientales y sociales como contaminación de mantos acuíferos por fugas durante la perforación, uso excesivo de agua, inyección de químicos tóxicos al subsuelo, incluso sismos, además de enfermedades respiratorias y cancerígenas entre las comunidades aledañas.
Carrizales dijo que las autoridades mexicanas tendrían que “voltear a ver” a las comunidades cercanas y revisar, por ejemplo, si hay un manto acuífero que las abastece.
Petróleos Mexicanos (Pemex) produce actualmente 195,000 barriles diarios de crudo en 115 asignaciones terrestres, de acuerdo con la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH).
La nueva cabeza del regulador ambiental en materia de hidrocarburos nunca ha ocultado su cercanía y apoyo al político tabasqueño. Durante sus comparecencias, reveló que estuvo en la nómina del partido gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
“Insisto en que el fracking, tengo que investigar un poco más, creo que ha mejorado muchísimo pero si el presidente dice no al fracking, la CNH no hace fracking”, agregó en su último acto público frente a Senadores.