Controversia Constitucional resultó ser propaganda electoral
N de R.- Crece laparadoja.com.mx. En esta ocasión damos la bienvenida a nuestra tercera colaboradora semanal, quien nos compartirá cada miércoles su opinión bajo el título DERECHO Y POLÍTICA. La autora de esta nueva sección es una inquieta joven estudiante de la Universidad Autónoma de Chihuahua, que ha sido reportera y actualmente conductora de noticieros radiofónicos. Junto con ella tenemos al pionero de POR LOS RINCONES DE LA HISTORIA y, recientemente, a “Cacho” de SE TIENE QUE DECIR…a parte de nuestro Programador, Jefe de Redacción, Columnista y próximamente más reporteros.
Por: CARLA CABELLO
La última ida que tuvo el alcalde de Parral Alfredo Lozoya Santillán la Ciudad de México, sin duda lo puso en los reflectores de los medios locales y nacionales. Esa era la idea del alebrestado parralense, quien está muy bien asesorado por su secretario del Ayuntamiento, y además excelente abogado, Francisco Sánchez.
Fue a interponer una controversia constitucional ante el máximo tribunal, a fin de que los ministros avalaran su postura, y declararan inconstitucional que el dinero correspondiente a las estancias infantiles se destine de manera directa a las mamás, quienes ahora tienen de dos: utilizar ese recurso correctamente, o encargar a sus bendiciones sabrá Dios con quién y pagar algunas deudas.
Parecería que es buena la intención de “El Caballo”, pues la mayoría de los votantes, aplaudieron y vieron con buenos ojos que el alcalde acudiera ante la justicia, y los defendiera de las ideas comunistas que tiene Andrés Manuel López Obrador. Lástima que la figura jurídica utilizada solamente sirvió como publicidad, y lo pondrá de nueva cuenta en los primeros lugares de las diferentes casas encuestadoras como uno de los políticos con mayor aceptación.
Le explico mejor. La controversia constitucional es una figura jurídica que se interpone de manera exclusiva ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), y tiene como finalidad resolver conflictos legales, en donde no queda clara la competencia de alguna autoridad. La pregunta es ¿dónde está la intromisión del Gobierno federal hacia el Ayuntamiento de Parral?
Los ministros no conocieron el asunto, pero no porque hayan recibido la orden de López Obrador sino porque, simple y sencillamente, no era el mecanismo correcto para ayudar a las mamás parralenses que sí utilizaban las estancias infantiles, porque en verdad no tienen donde dejar a sus hijos.
Y usted pensará ¿se habrán equivocado los abogados de “El Caballo” y lo asesoraron mal?, pues tampoco. Lo que pasa es que es la manera más fácil de llegar a la SCJN, y ponerse en los reflectores para que todos digan: “él sería un muy buen gobernador”.
Si Alfredo Lozoya y todo su equipo jurídico hubieran tenido la verdadera intención de hacer algo en favor de la niñez, la cosa no sería tan mediática, pero sí efectiva, porque así se tendría que amparar la niña o niño afectado, a través de quien ejerza la patria potestad. Es decir, los padres del menor, ante la violación de autoridad que sin duda existe.
Ahora sólo queda esperar el momento para que el alebrestado “Caballo” sea nota para los periódicos, cuando acuda ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, para que de nuevo sume puntos con el electorado y que vean una opción buena en él para el 2021.
Que mi expresión te haga pensar.