Con una degustación, maridaje de bocadillos y paletas de hielo, la empresa Destilados Delincuente presentó en las instalaciones de Fomento y Desarrollo Artesanal del Estado de Chihuahua (Fodarch) el sotol Delincuente, que a dos años de entrar al mercado ya realiza exportaciones a Estados Unidos y lo distribuye en varios estados del país.
El producto se destila en ciudad Madera, Chihuahua y su proyección en tan corto tiempo, se debe básicamente al empuje que este tipo de bebidas empiezan a tener a nivel mundial, pero también al sabor único que se ha podido dar al producto en su proceso de producción, explicó Emiliano Vargas Frías, propietario de la empresa.
A diferencia de otros tipos de sotol, la bebida que producen es de 45 grados, que lo hacen amigable a cualquier paladar, además, la elaboración de paletas de hielo a base del producto, lo han hecho versátil y divertido.
Vargas Frías explicó que además del toque que tiene el sabor del destilado, la originalidad de su empaque ha ayudado también a que se venda en estados como Arizona y Texas, además se envían unidades a la Ciudad de México, Veracruz, Monterrey, San Miguel de Allende, Querétaro, Guadalajara y Ciudad Juárez.
“El tema de empacarlo en una bolsa de papel y ligarlo a un delincuente amigable, aunado a la serie de frases e imágenes que tiene impresas relacionadas con el sotol chihuahuense, ha sido esencial también para su crecimiento”, añadió el empresario.
La producción de esta bebida ancestral chihuahuense se realiza en ciudad Madera, donde se obtiene el sereque, la planta que debe tener al menos 7 años de antigüedad y que debe jimarse para obtener las “piñas”.
“Las piñas” de sereque que tienen un peso de entre 30 y 40 kilos, son cocidas por tres días en un horno cónico que se elabora con piedra volcánica de la región, el horno es tapado con costales que contienen vagazo, que a su vez son enterrados.
De acuerdo con Vargas, el siguiente paso es la fermentación en tinas de madera con capacidad de 500 litros por un lapso de 7 días, para dar paso a un primer proceso de destilación, continúa la condensación con la que se obtiene un primer producto, que es agua con alcohol.
Posteriormente se hace una segunda destilación que separará el agua del alcohol, que sale con un porcentaje de 80 grados, es donde se balancea el producto con agua destilada, para dejarlo en su graduaje final, que es de 45.
“Creemos que este es un graduaje muy amigable, por lo que es bien aceptado en Estados Unidos, que es a donde se exporta con mayor regularidad”, explicó.
Elena Acuña, directora de Fomento y Difusión del Fodarch, agradeció a los asistentes su presencia en la presentación del producto, que forma parte de las actividades que ahí se realizan para la promoción de los productos chihuahuenses.